Como hacer pan de viena

Este Pan de Viena está elaborado con la masa de pan dulce que os mostrábamos esta mañana. En textura es muy similar al brioche, pero es menos dulce como ya habos comentado. Realmente la textura es espectacular, es sencillamente fantástico poder hacer panes rápidos tan ricos como el Pan de Viena. Si lo pruebas, verás cómo se lo rifan para la merienda o el desayuno.

Ingredientes:
Preparación:
  1. La leche debe estar tibia y la mantequilla a temperatura ambiente si vas a hacer la masa a mano.
  2. Disuelve la levadura en la harina frotando con la yema de los dedos, después añade la mantequilla y frótala también para que se fusione con la harina.
  3. Después añade el azúcar, la sal, dos de los huevos y la leche y trabaja la masa hasta que esté elástica, suave y muy poco pegajosa.
  4. Recuerda que debemos trabajar una masa pegajosa que, estirándola, golpeándola y doblándola para atrapar el aire en su interior hasta lograr unirla sin necesidad de añadir harina, lo que garantizará un pan más ligero y esponjoso.
  5. Haz una bola con la masa y déjala reposar unos 45 minutos en un cuenco cubierto con un paño al abrigo de las corrientes de aire.
  6. Si quieres hacerla con el robot de cocina, sigue las instrucciones de la máquina.
  7. En Thermomix vierte la harina en el vaso y añade la levadura desmenuzándola, mezcla unos minutos a velocidad 3-4 y después añade el azúcar y la sal, mezcla e incorpora el resto de ingredientes y amasa a velocidad espiga durante 6-8 minutos.
  8. Se pueden hacer barritas más finas y más largas o panecillos redondos.
  9. Una vez que dispongas de la masa tras haber reposado durante una hora, viértela sobre la superficie de trabajo ligeramente enharinada, divla en tantas porciones como panecillos quieras hacer.
  10. Aplasta la masa con las manos formando rectángulos, dóblalos como si fuera un sobre y presiona con la palma de las manos en el punto de unión de la masa, donde se formará el nervio.
  11. Esta masa crece mucho así que cuando le des forma a los panecillos, hazlos a la mitad de tamaño del que quieres obtener, a lo ancho y a lo largo.
  12. Dispón los panecillos en la bandeja del horno cubierta con papel sulfurizado o un silpat, deja espacio entre ellos para que al crecer no se toquen.
  13. Cubre con un paño y deja levar una hora.
  14. Pasado este tiempo, pinta los panecillos con el huevo batido al que le habrás añadido una pizca de sal y hazle unos cortes con una cuchilla afilada.
  15. Hornea el pan de Viena a 180º C (horno precalentado a 200º C) durante 10-12 minutos, hasta que esté dorado, en ese momento retira la bandeja del horno y deja enfriar sobre una rejilla.
  16. Será difícil resistirse a probar el pan de Viena recién hecho, pero después te ofrecerá una textura súper esponjosa y, podrás rellenarlo con lo que prefieras.